No es un tema baladí.
Al menos no lo es para mí, que me tengo por escritora, ni mucho menos
para un editor o para un autor-editor.
Soportes para la escritura ya ha habido unos cuantos a lo largo de la
historia, empezando por la piedra, las tablillas
de arcilla, la corteza de madera o de bambú, el metal, los rollos de papiro, el
pergamino o las cuerdas y los hilos de colores para elaborar tocapus y quipus… Así hasta
llegar al papel, a nuestros amados libros de papel cuyas tapas y páginas
podemos tocar, manosear, sentir, oler, pasar, volver a pasar y hacer crujir entre los dedos.
Átomos, siempre átomos, para configurar ese objeto bello y familiar con
el que transmitir conocimiento, entretener, hacer soñar o evadir, con el que dejar testimonio de nuestro paso por
aquí, ¡ay!, de nuestro duro y perenne transitar. Y a ellos nos aferramos a
pesar de que ya vivimos inmersos en un nuevo mundo de bits, a pesar de que yo,
ahora mismo, estoy escribiendo esto que quiero decir en un folio virtual (¿existe...? porque no está hecho de átomos, sino de bits), que después colgaré en una “nada” invisible, lista para
materializarse en forma de blog en la pantalla de un ordenador. A voluntad y a
placer, como la perversa máquina trampa que inventase Morel.
Porque ¿qué importa más, el soporte o lo que este contiene, es decir, mera ilusión, símbolo, ficción...?
Y mientras lo decidimos, el libro de papel, herido ya por la osadía (todavía
imperfecta) de ese juego de espejos trucados, de ese estúpido y simple (pero
prodigioso) sistema binario, nada trascendente, que no huele ni cruje ni puede tocarse, entona su canto de cisne.
Y mientras lo decidimos, el libro de papel se embellece, se
edita con mimo y con el mayor de los esmeros: se cuida la portada y el gramaje, se aumenta su valor estético y artístico incorporando fotografías, ilustraciones... Pero su fin es irrevocable. El bit es como el aleph:
un punto mínimo de máxima densidad. Un bucle de eternidad. La verdadera Biblioteca de Babel.
[Lo confieso: yo aún no tengo lector digital, pero si alguien me lo quiere regalar lo aceptaré de buen grado... creo. De todas formas dejo aquí algunos enlaces para quien quiera ahondar más en la cuestión].
http://librosyhumor.blogspot.com.es/2012/05/vargas-llosa-el-ebook-y-la-literatura.html
http://librosyhumor.blogspot.com.es/2011/10/ebook-vs-papel-1.html
http://www.escritores.org/recursos-para-escritores/articulos-de-interes/4946-el-libro-electronico-y-las-reticencias-de-los-escritores
[Lo confieso: yo aún no tengo lector digital, pero si alguien me lo quiere regalar lo aceptaré de buen grado... creo. De todas formas dejo aquí algunos enlaces para quien quiera ahondar más en la cuestión].
http://librosyhumor.blogspot.com.es/2012/05/vargas-llosa-el-ebook-y-la-literatura.html
http://librosyhumor.blogspot.com.es/2011/10/ebook-vs-papel-1.html
http://www.escritores.org/recursos-para-escritores/articulos-de-interes/4946-el-libro-electronico-y-las-reticencias-de-los-escritores
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