Ser cifra que oculte el secreto del aire, el sentido de la palabra
en el viento. Ciframos y articulamos mensajes
confiando todavía en la remota posibilidad de que esos textos
puedan ser percibidos y descifrados por alguien
cuya voz escuchamos y sin embargo no logramos identificar.
Elaboramos siempre discursos desde el poder
—aunque lo hagamos contra él— porque no podemos soportar
la eventualidad de vivir en un mundo
sin rostro y sin sentido conocidos, porque no estamos dispuestos
a renunciar a la construcción de un mundo diseñado
a nuestra imagen y semejanza. Hablamos, en fin, y apenas
decimos nada e ignoramos que el silencio
es casi siempre el grito más molesto, el sonido no escuchado
que al vacío de la vida nos convoca. Irreal como el alma de un perro,
el dolor es una cifra grabada en la frente de todas las víctimas.
Alfredo Saldaña
Pasar de largo (1990-2000)
Fotografía de Ane Lagerqvist
No hay comentarios:
Publicar un comentario